Guía para cambiar el pienso de tu perro

Te contaremos lo que necesitas saber para cambiar a tu perro de pienso, y cómo hacerlo.

¿Estás pensando en cambiar el pienso de tu perro?

¿Es bueno cambiar el pienso de tu perro?

¿Cómo puedo realizar la transición de un pienso a otro?

Si tienes todas estas preguntas, ¡sigue leyendo!

Al igual que las personas, los perros pueden llegar a cansarse de comer la misma comida durante mucho tiempo. Es por eso que cambiar de pienso es una excelente opción para mantener alimentados a nuestros peludos sin que empiecen a manifestar rechazo o aburrimiento por su comida.

Puede haber diferentes motivos por los que queramos cambiar el pienso del perro, como por ejemplo la fuente de proteínas. Si estamos utilizando un pienso con una fuente de proteínas basada en carne (pollo, ternera…), podemos considerar modificar esta fuente de proteínas a otra proveniente del pescado, así ayudamos a nuestro peludo a mantener una dieta variada y saludable.

Para ello, debemos tener en cuenta que los perros presentan más dificultad que los humanos para metabolizar los nutrientes que ingieren, un cambio brusco en su alimentación podría tener como consecuencia diarreas o vómitos. Por ello, es aconsejable realizar este cambio de alimentación de forma gradual, para que el organismo del animal se adapte sin experimentar un rechazo al nuevo alimento.

Pasos para cambiar el pienso de tu perro

Debes tener en cuenta que, durante una semana aproximadamente, tendrás que utilizar los dos tipos de pienso (el que utilizas y el nuevo), variando gradualmente las cantidades de un pienso y otro:

  • Primer y segundo día: Mezclar 25% del pienso nuevo con 75% del pienso anterior.
  • Tercer y cuarto día: Mezclar 50% de cada pienso.
  • Quinto y sexto día: Mezclar 75% del pienso nuevo con 25% del pienso anterior.
  • Séptimo día: 100% del pienso nuevo.

Aunque esto sería lo ideal en la transición del cambio de pienso, durante este cambio es recomendable que observes a tu perro y a cómo reacciona al cambio, en aspectos como el apetito que presenta o si se produce algún cambio brusco en las heces. Si el animal presenta síntomas más graves (como vómitos), consulta inmediatamente con tu veterinario.

También debemos considerar que cada animal es diferente y pueden reaccionar de distintas maneras, dependiendo de su peso, talla, actividad, edad, etc, o simplemente que algunos perros sean más delicados que otros, o toleren mejor o peor los cambios en su dieta. Lo que sí es recomendable es que este cambio se haga de forma gradual en cualquier caso.

Esperamos que este artículo te haya servido de ayuda si estás pensando en cambiar la alimentación de tu perro. Puedes echar un vistazo en nuestra tienda online para ver toda la gama de alimentación de la que disponemos.

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